Washington, 4 sep (Prensa Latina) Aunque en gran parte del mundo se festeja el 1 de mayo, en Estados Unidos el Labor Day (Día del Trabajo) se celebra cada año un día como hoy, el primer lunes de septiembre.
La fecha, que es feriado federal, marca el fin no oficial del verano y de acuerdo con las estadísticas difundidas en medios locales, cerca de 14 millones de ciudadanos aprovecharon este fin de semana largo para salir de casa.
Pero desde el punto de vista histórico algunos estudiosos consideran que fue escogida la fecha para distanciarse de los orígenes de las conmemoraciones internacionales del 1 de mayo, que se instauró en honor a los mártires de Chicago.
El 4 de mayo de 1886 hubo una manifestación por las reivindicaciones de las ocho horas de trabajo que terminó en lo que se conoce como la Revuelta de Haymarket o Masacre de Haymarket dada la represión contra los participantes en la protesta de Haymarket Square, Chicago.
Aquel día estalló entre los policías un artefacto explosivo que mató a un oficial y produjo heridas a otros, y abrieron fuego sobre la multitud, provocando un número desconocido de víctimas fatales y heridos entre los obreros.
Se declaró el estado de sitio y el toque de queda, y en jornadas siguientes se detuvo a centenares de personas, que resultaron golpeados y torturados, acusados del asesinato del policía, de acuerdo con las reseñas históricas.
El 21 de junio de 1886, se inició la causa contra 31 presuntos responsables, un número que se redujo a ocho acusados, en un juicio calificado de farsa.
Aunque nada pudo probarse en su contra, los ocho de Chicago fueron declarados culpables, acusados de ser enemigos de la sociedad y el orden.
A tres de ellos los condenaron a prisión y cinco a la horca: George Engel (alemán, 50 años, tipógrafo); Adolph Fischer (alemán, 30,periodista); Albert Parsons (estadounidense, 39, periodista); August Vincent Theodore Spies (alemán, 31, periodista), y Louis Lingg (alemán, 22 años, carpintero). Pasaron a la historia como los mártires de Chicago.
Los hechos dieron lugar posteriormente a las conmemoraciones del 1 de mayo, considerado el Día internacional de los trabajadores en la gran mayoría de los países del mundo, excepto en Estados Unidos y Canadá, donde, dicen, trataron de evitar la glorificación de los «mártires de Chicago».
De manera que el Labor Day se fijó el primer lunes de septiembre, y, según argumentos más simples, entre otras razones se escogió para reducir la brecha entre los feriados ya existentes, pues había un largo período entre el Día de la Independencia (4 julio) y Thanksgiving o Día de Acción de Gracias(noviembre).